Naturología Humanista agradece a Yoshinori Oshumi, y a todos los equipos que investigan la autofagia, su aportación científica a la comprensión del sistema depurativo celular, que el naturismo higienista viene utilizando desde milenios, como método para la salud integral de los seres vivos, mediante los consejos orientados a la utilización de una dieta saludable, dieta vegetal cruda en alto porcentaje y libre o de escaso contenido de alimentos animales. Sería deseable que el método depurativo fuera de uso habitual en la población. Con lo cual se podrían evitar muchos sufrimientos y enfermedades crónicas, degenerativas y genéticas.
El reciclaje celular se lleva el Premio Nobel de
Medicina 2016
El Premio Nobel de
Medicina ha recaído en el japonés Yoshinori Oshumi por sus descubrimientos
sobre
los mecanismos de autofagia, que permiten a
nuestras células devorar partes de sí mismas. Así eliminan bacterias y virus,
obtienen combustible y degradan material dañado por el envejecimiento. Los
fallos de este proceso, se relaciona con enfermedades como el párkinson y el
cáncer
Yoshinori Oshumi, investigador en el Instituto de Tecnología
de Tokio (Japón). / Nobel Prize
La Real Academia de las Ciencias Sueca ha dado a conocer hoy
el Premio Nobel de Medicina. El laureado es Yoshinori Oshumi (Fukuoka, 1945),
investigador en el Instituto de Tecnología de Tokio (Japón), por su papel en el
estudio de los mecanismos subyacentes a la autofagia.
El concepto de autofagia, una especie de ‘autoalimentación’
celular, surgió durante la década de 1960, cuando los investigadores observaron
por primera vez que la célula podría destruir sus propios contenidos
encerrándolos en membranas y formando vesículas que eran transportadas a un
compartimiento de reciclaje, llamado lisosoma, para su posterior degradación.
Sus descubrimientos condujeron a un nuevo paradigma en la
comprensión de cómo la célula recicla su contenido, y suponen una vía para la
comprensión de la importancia de la autofagia en muchos procesos fisiológicos,
como la adaptación a la inanición o la respuesta a la infección.
Así, las mutaciones en los genes clave de la autofagia
pueden causar enfermedades, ya que estos procesos están involucrados en una
serie de condiciones como el cáncer y las patologías neurológicas.
Gracias al actual premio Nobel y al resto de investigadores
que siguieron sus pasos, hoy sabemos que la autofagia controla importantes
funciones fisiológicas en los cuales los componentes celulares necesitan ser
degradados y reciclados.